ADORACIÓN REAL, PERPETUA Y UNIVERSAL AL SANTÍSIMO SACRAMENTO (ARPU)
III Jornadas de la Federación Mundial de Obras Eucarísticas de la Iglesia (=FMOEI) celebradas en León (30 septiembre-2 de octubre)
Cronica efectuada por don José Luis Esteban Vallejo, (Consiliario Nacional de la ARPU)
Ya las anunciaba a celebrar en León cuando hice gestiones y hablé con D. José Ángel Casero Linares, presidente de FMOEI de las “Opera Eucharistica” de la Iglesia, a la que pertenece la ARPU. Han sido las III Jornadas (30 septiembre-2 de octubre); envié dos misivas a los grupos de ARPU, de Burgos y a Delegados nacionales invitando al respecto (cf. 28-8-2022)”.
Fuimos tres de Burgos: Enrique Pérez (quien nos llevó de Burgos a León y nos trajo en su coche), José Luis Cuesta y yo; de Valladolid fueron dos mujeres de la ARPU: Claudina y Rosa.
Se siguió el programa definitivo… José Luis Cuesta, como secretario, ha destacado sobre todo las intervenciones y las ponencias de formación.
Yo destaco completando los siguientes puntos de las mismas III Jornadas:
1.- La Misa concelebrada en la catedral de León el día 1 de octubre presidida por Don Luis Miguel, el Sr. Obispo de la Diócesis de León, en la que oficié o concelebré proclamando el Evangelio y haciendo de con-celebrante a su derecha.
Después de la Santa Misa, como recuerdo unas fotos en la sacristía y al maestro de ceremonias que también tiene algunos pueblos le hablé de la ARPU para ellos. Le hice llegar algunos recursos al respecto.
2.- En el transcurso de la mañana del 1 de octubre hubo una visita guiada al claustro antiguo de la Colegiata, al panteón de los Reyes de León, al museo (cf. cáliz de Doña Urraca), a la Biblioteca, etc,
Por la tarde 6’30 (después del rezo del Rosario y de Vísperas en la capilla de Santo Martino), me tocó presentar la ponencia en el Salón del Pendón (de Baeza). Para ilustrarla, aunque con alguna dificultad para encontrar proyector, me ayudó a hacerlo, y lo prestó el “acólito” Luis Miguel. El título fue sobre el “precioso, necesario y urgente carisma de la ARPU” (Cf. en ocho puntos el texto e imágenes que saldrán al menos en soporte digital según la FMOEI).
3.- El día 2 de octubre fue muy gozoso: por ser Domingo, porque presidí el oficio de los Laudes con canto en la capilla de la Colegiata.
Luego fuimos en un viaje turístico con guía por la ciudad en la fiesta por San Froilán: desfile de 300 pendones representativos de los pueblos y parroquias de la Diócesis a lo largo de la calle principal de León, la de Ordoño II; nos detuvimos ante las murallas de la época romana (6ª.Legión=León), ante el edificio de Antonio Gaudí, vimos cerca la iglesia de San Marcelo y compañeros mártires (de la novena Legión), recorrimos otras calles hasta llegar a la fachada de la catedral y la vimos con los referidos pendones colocados ante sus portadas góticas.
Volvimos a la Basílica de San Isidoro; ante sus fachadas la guía nos las explicó un poco por fuera. Por dentro no intervienen los guías porque está el Santísimo Sacramento expuesto permanentemente (en la de San Isidoro).
A las las 12’30 por deferencia del Abad de la Colegiata, Don Francisco, presidí la celebración de la Santa Misa de Domingo con la Colegiata llena de los fieles de San Isidoro y los adoradores inscritos en las Jornadas.
A todos animé a ser apóstoles del Domingo y de Jesús Sacramentado que nos espera en los Sagrarios.
La Santa Misa concluía con Grita, Profeta, un cántico muy propio y de los clásicos de la ARPU. Como estribillo dice:
“Ve por el mundo, grita a la gente
que el amor de Dios no acaba
ni la voz de Dios se pierde”. (bis)
Con la ayuda del órgano y organista para los cantos resultó más solemne y fructuosa. ¡Demos gracias a Dios!
4.- Después de la celebración eucarística fuimos hacia el hotel para la comida con los últimos que quedamos en el hotel. Junto al presidente de la FMOEI, D. José Ángel Casero Linares, comentamos algunos asuntos de nuestra Asociación y de la suya.
Después de la comida algunos volvimos a la Colegiata para despedirnos del Señor (siempre expuesto en la custodia) y nos volvimos a Burgos de un tirón. Nos trajo Enrique Pérez Pardo, tan atento como siempre, y con José Luis Cuesta. En el transcurso del viaje rezamos el Rosario como lo hicimos a la ida.
Saludos a Claudina y a los adoradores (as) en la ARPU de Valladolid (del tiempo presente y del futuro).
5.- Entre muchas luces y aciertos de estas Jornadas me parecen tener alguna sombra o laguna. Echo en falta no haber sacado algún manifiesto, algunas conclusiones, líneas de acción, orientaciones…algo para las diversas Asociaciones eucarísticas…para enviar a los mismos Sres. Obispos, a la CEE, o, al menos, a la CEAS. ¿Se podrían hacer o sacar a “posteriori”? Creo que sí.
“Señor, a lo que sembramos dale crecimiento….”.
Atte. José Luis Esteban Vallejo, Consiliario Nacional.