ADORACION REAL, PERPETUA Y UNIVERSAL AL SANTíSIMO SACRAMENTO (ARPU)
“MEMENTO, Adorador”: Acuérdate de que en este mes…
Éste es el título de uno de nuestros apartados en nuestras publicaciones mensuales, además de las ya consolidadas Cartas y Noticieros. Se trata de “memorare” o “recordare” para traer a la memoria y al corazón acontecimientos, efemérides, aniversarios, fiestas principales, avisos, normas de funcionamiento de la ARPU, medios también de formación y animación que nos ayuden a coger y asimilar más y más el “espíritu” y las “normas” de nuestro precioso carisma.
Según esto, ¿qué podemos recordar, celebrar… para mejor vivirlo en este mes de noviembre de 2020
1.- La lectura atenta de los Estatutos de la ARPU
Hemos recordado en otras ocasiones que “dada la importancia y necesidad de conocer los Estatutos en una Asociación eucarística como la nuestra, nos ha parecido necesario a los miembros del Consejo Nacional darlos a conocer -para practicarlos- todos” y de hecho están “colgados” en nuestra Pagina Web www.arpu.es
Decíamos “aunque están ya a disposición en nuestra meritoria y recientemente creada Página Web-blog de la ARPU, recordemos algunos artículos cada mes”. Y poníamos en los meses pasados desde julio a octubre algunos artículos referentes a los diversos miembros de los Consejos a renovar a nivel parroquial, diocesano y nacional.
Al observar que hay quienes aún no han cumplimentado debidamente las fichas correspondientes en esos tres niveles damos este mes de plazo.
2º.- Algún comentario a los cargos a elegir interpretando algo los Estatutos al respecto.
Ya lo hacíamos en la Carta del septiembre-octubre pasados para mejor acertar a la hora de cumplir con este deber que también es una muestra de fe y amor a Jesús Sacramentado. Sin tener los Consejos formados a todos los niveles y en todos sus miembros el “carro” de la ARPU, nuestro movimiento y asociación eucarística, no pueden ir al ritmo que Jesús quiere. ¡Qué contraste y diferencia con el apóstol entusiasta de la Eucaristía, recién beatificado (12-X-2020 en Asís), Carlos Acutis de quien ya hemos dado la noticia y, D. m., hablaremos en otra ocasión mucho más. Por eso, Memento o Memorare, adorador”, decíamos en el mes pasado:
Recordad lo que os decía en esa Carta de septiembre-octubre en comentario a los cargos ARPU:
1.- El trabajo ha de ser “en equipo con los demás miembros de los Consejos, pero cada uno en su cargo y nivel: parroquial, diocesano y nacional”.
“2.- Los Consiliarios: animando a que se observen los Estatutos al respecto, motivando sobre la importancia que tiene la organización y el funcionamiento de la ARPU para poder transmitir el carisma recibido… Por eso la ARPU es una asociación y movimiento eucarísticos…
3.-Los Delegados (as): cumpliendo y haciendo que se cumplan los mismos Estatutos, siendo “motores” y “tirando del carro” de la ARPU continuamente y en buena dirección…
4.-Los Secretarios (as): en general teniendo al día los libros y documentos de Secretaría…
En este caso concreto de votaciones-elecciones: preparando, presentando y enviando las fichas correspondientes, levantar actas de las mismas y, debidamente cumplimentadas, remitir un ejemplar de las actas: de los parroquiales al Consejo diocesano y de los Consejos diocesanos al propio Obispo y al Consejo Nacional y éste, el Nacional, comunicando el nuevo Consejo Nacional de la ARPU que sea elegido a la CEAS de la C.E.E.
5.- Los tesoreros (as): procurando que no falten recursos para las actividades de la ARPU: por ejemplo, hacer fotocopias de fichas, de citaciones para reuniones, de cartas o documentos a difundir, de programaciones, de gastos de libros necesarios de Secretaría a tener como son los Libros de Asociados, de Actas, de Correspondencia de archivo de la ARPU, de otros libros y documentos, de Cuentas, etc. También, en línea de principio, dar estipendio por el encargo de Santas Misas por adoradores fallecidos, etc.
Aunque no exista cuota de los asociados pero sí se puede y debe pasar cestillo o la bolsa en las reuniones, buscar o pedir donativos…
6.- Los vocales o celadores: dos o tres para cada consejo parroquial, tres para los diocesanos y el nacional: estando a disposición y ayudando en general a los cargos anteriores, por ejemplo, llevando fichas y citaciones para que lleguen a todos los adoradores y puedan votar, informar a los socios, invitar, visitar a los enfermos, acompañar en los tanatorios o funerales de los adoradores…
7.- También os recuerdo lo que os decía en septiembre-octubre pasados:
“Si en algún lugar o población no hubiera suficientes miembros para cumplimentar la ficha para formar el Consejo Correspondiente, tanto más urge la ocasión de que los que haya inviten a amigos y conocidos, compañeros de trabajo o de paseos, etc., a pertenecer a la ARPU ofreciéndoles este estupendo cauce de apostolado cristiano-eucarístico”.
“Entre tanto y para estos dos meses os saludo de nuevo, os encomiendo a todos y quedo a vuestra disposición en “Jesús Sacramentado por nuestro amor”.